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El Departamento de Urbanismo del Ayuntamiento de Santoña colabora con el pueblo ucraniano con el envío de alimentos y otros productos de necesidad

El Departamento de Urbanismo del Ayuntamiento de Santoña, que dirige el concejal regionalista Moisés Cué, ha culminado una campaña de recogida de alimentos y otros productos de necesidad que ya han emprendido viaje a Ucrania en una muestra más de solidaridad hacia este país.
 
La Iniciativa, tal como ha explicado el propio Cué, surgió de repente ante la gravísima situación en territorio ucraniano y en donde las necesidades de todo tipo son cada vez mayores y urgentes y así “después de comentarlo entre algunos de nosotros salió espontáneamente la propuesta para, a reglón seguido, ponernos a trabajar” ha declarado.
 
“Así comenzamos algunos miembros del Departamento a realizar aportaciones de dinero, para, seguidamente, proceder a la recogida, prácticamente en diez días, de toda una serie de artículos de limpieza, medicinas, alimentos no perecederos y material de aseo, demostrándose una vez más la generosidad de los santoñeses, por lo que estamos muy contentos y satisfechos porque nuestra villa ha dado sobradas muestras nuevamente de su espíritu solidario” ha explicado el edil.
 
Aunque la iniciativa nació en el propio seno de este Departamento municipal, la llamada solidaria salió a la calle “y han sido varios los comercios santoñeses que con un desprendimiento absoluto, a pesar de que no se atraviesan momentos boyantes ante esta nueva crisis, que han colaborado con nosotros con mucho entusiasmo aportando aquello que buenamente nos han podido donar. Al entrar en los negocios pidiendo una colaboración la empatía ha sido absoluta desde un primer momento” ha señalado el titular de Urbanismo.
 
Por fin, tras la recogida de productos se cargaron todos ellos en la furgoneta de “Servicios”, que “se llenó hasta arriba” y de ahí se dirigió a Santander para, tras los correspondientes trasbordos, llegar hasta Ucrania.
 
Para Cué es una satisfacción inmensa, que nos llena de alegría, “el poder aliviar, aunque sea, en una muy pequeña proporción, las muchas necesidades de un pueblo destruido por la guerra”.