Las Mesas de Movilidad de Cantabria protestan ante el cierre de la oficina de atención al viajero de la estación de autobuses de Laredo
Exigen al Gobierno de Cantabria que obligue a ALSA a recuperar estos servicios.
La oficina cesó el pasado 1 de septiembre, convirtiéndose, junto con la de Torrelavega, en el segundo cierre en pocas semanas.
Las Mesas de Movilidad de Cantabria han mostrado su “estupefacción” al comprobar como “ALSA manda en Cantabria bastante más que el propio Gobierno”. Tras el cierre de la oficina de Torrelavega, desde la Mesa del Besaya se dirigieron a la Dirección General de Transportes, obteniendo por respuesta “muchas excusas y soluciones pírricas que aún no se han implementado”, según han explicado en nota de prensa.
También han querido recordar que “la falta de personal y de oficina de información afecta a las personas con mayor desventaja en nuestra sociedad, fundamentalmente personas mayores, personas con discapacidad, visitantes que no conozcan bien la zona, las líneas o los horarios (en especial los extranjeros) y personas con pocas habilidades digitales, sin móvil o sin conexión a internet. Sin olvidar que ello supone una carga de trabajo adicional para empleados de la cafetería y chóferes, que tienen que perder el tiempo en responder dudas a los numerosos usuarios que les abordan cuando evidentemente no es su función. Todo ello al final supone añadir más trabas y dificultades para utilizar el transporte público en un momento en el que precisamente se deberían redoblar esfuerzos en facilitar y promover su uso”.
Además, han exigido a la Dirección General de Transportes de Cantabria y a ALSA que restablezcan el servicio de atención presencial al viajero en las dos estaciones de autobuses, Torrelavega y Laredo, con un horario suficiente de al menos 14 horas diarias suficiente para cubrir las horas de mayor afluencia desde primera hora de la mañana a última hora de la tarde los 7 días de la semana, y la elaboración de Planes Estratégicos que revitalicen y dinamicen ambas estaciones.